martes, 15 de abril de 2014

Amiga mía!

Después de tantos días añorándolo, pasamos con una de mis amigas una de esas tardes largas, llenas de mil cosas y mate, mate, y más mate, poniéndonos al día de todo, con esa confianza del que se conoce posta y del que no importa cuanto tiempo haga que no ves, pero está siempre ahí porque está dentro de tu corazón.Soy feliz cuando se dan estos momentos que cada año que pasa se tornan más difíciles de coordinar: uno es un pelotudo agenda dependiente, que siempre tiene algo que hacer que en teoría es más importante que eso que querés hacer. Hoy fuimos libres, y a pesar de los kilombos y el desorden, estuvimos juntas, verdes de tanto mate y de la bronca por muchos de los temas que nos preocupan, y muertas de risa por esas cosas que a pesar de que al resto del mundo no les causen gracia a nosotras sí. Ojalá podamos organizar otro viaje como el que hicimos, aunque va a tener que darse un eclipse total de luna como el de anoche, pero cruzo los dedos, para que se pueda, y cruzo los dedos, para que a pesar de las corridas y de los años, podamos seguir estando así, lejos pero juntas, hasta que seamos dos viejas chotas en la cola de un banco esperando cobrar la jubilación, o yendo a mirar pasar el tiempo en una plaza, en una playa o en donde sea. Ojalá siempre seamos amigas, Gominita de mi corazón!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario