La impaciencia de siempre

Abrí los ojos, y corrí a la balanza. Por favor! Tengo menos palabra que una calculadora! Lo que fue genial es no estar mas arriba en el peso. La balanza no se movió, y teniendo en cuenta las circunstancias, eso es genial. Me quedé dormida, y la mitad de las cosas que iba a hacer el sábado, no voy a poder. No importa, evidentemente, necesitaba dormir un poco más! Pensaba en el uniforme, y veré como siempre, de buscarle la vuelta. Ya llegará el día en que pida un talle mas chico, me lo pruebe, y me quede bien, es necesario que entienda que me tomo unos años llegar a este peso, y tomará otros tantos volver a ponerlo en orden. Hoy hay sol, hoy está hermoso, la vida me sonríe. De verdad tengo muchas cosas para ser feliz y eso es lo que importa. Soy impaciente? Mucho. Estoy gorda? Mucho. Me aman? Mucho. La última frase, hace que las otras carezcan de importancia. Ahora, a mover este culo para organizar mi casa tsunami, porque ademas de todo lo que ya dije, soy desordenada!